La Ética es un concepto que siempre está presente cuando de
la formación de un profesional se trata.
En el ámbito empresarial, juega un papel preponderante por
la gran diversidad que caracteriza a uno de sus componentes más importante: el Factor Humano.
Las personas, poseedoras de las competencias necesarias para
echar a andar un negocio; pueden de igual forma destruirlo, si su
comportamiento y accionar profesional no están basados en preceptos éticos y
morales.
Partiendo de entender la Ética como el pensamiento
sistemático acerca de las consecuencias morales de nuestras decisiones; cuando
se adapta este concepto a los negocios
lo que se pretende es que los Colaboradores que conforman una determinada Organización
sean capaces de comportarse y tomar decisiones, como serían: la comunicación honesta, trato justo,
responsabilidad social corporativa, justa competencia, responsabilidad
empresarial y respeto a las leyes y normas de la sociedad; basadas en
estándares morales.
Todo lo cual supone o deriva en la creación de un ambiente
organizacional seguro, donde acciones como: el acoso sexual, nepotismo,
invasión a la privacidad, irrespeto y violación de la seguridad de los
documentos manejados, malversación de fondos, etc. se ven reducidas a su más
mínima expresión o han sido erradicadas.
Para las empresas modernas, estas cualidades son una de sus prioridades más importantes y la consideran como un valor agregado, capaz
de generar exitosas oportunidades de negocio, por lo que al contratar tratan de
asegurarse de que sus futuros colaboradores posean las siguientes
características personales:
- Honestidad
- Integridad
- Confiabilidad
- Lealtad
- Seguridad
- Respeto y Preocupación por los demás
- Compromiso con la excelencia
- Liderazgo
- Buena Reputación y Moral
- Credibilidad
Estas características, forman parte de las bases para el
éxito profesional sostenido e influyen directamente en la imagen que la empresa
transmite a sus relacionados, ya que gran parte de ésta se basa en el accionar
de sus Colaboradores; por lo tanto tienen el compromiso de incentivar las
mismas, a través de sus políticas, y con el establecimiento de normas de
procedimiento claras, ajustadas a este fin.